viernes, 24 de enero de 2014

-ZOROASTRISMO Y CRISTIANISMO MILES DE COINCIDENCIAS, CIENTOS DE AÑOS DE DIFERENCIA.

      Desde milenios han encarnado seres de luz/amor como Jesus con el mismo mensaje: somos seres espirituales que deben despertar consciencia y elejir o el servicio a los demás (bien) o el servicio a si mismo (mal). una nueva religión basada en la adoración de una deidad suprema llamada Aura Mazda u Ormuz («el Señor Sabio»), acompañada de los seis espíritus de la verdad, la justicia, el orden, la docilidad, la vitalidad y la inmortalidad.






       Era una religión dualista, pues a este dios de la justicia y la verdad se le oponía un espíritu del mal, llamado Ahriman. Los mazdeístas suponen que los individuos son libres de elegir entre el bien y el mal, pero que existe un imperativo moral para conducirse de forma justa y que las fuerzas superiores de Aura Mazda acaban por imponerse siempre; la creencia en la vida después de la muerte traduce esta confianza en el triunfo de las fuerzas del bien.  Zoroastro redactó unos cánticos llamados gathas, que constituyen el componente más antiguo del Avesta o libro sagrado del mazdeísmo. Luchó contra la religión politeísta dominante en el mundo indo-iranio y consiguió convertir a un príncipe de la región periférica de Asia central llamado Vishtaspa, que le protegió y facilitó la extensión del mazdeísmo. Y cuando la región fue incorporada al imperio persa -en la época en que murió Zoroastro- su religión comenzó a extenderse por un espacio mayor, siendo adoptada por los emperadores Aqueménidas. 

La expansión del mazdeísmo entre los persas hizo que se convirtiera en religión oficial bajo la dinastía Sasánida (siglos III-VIII), después del periodo helenístico, en el cual había retrocedido frente a la influencia cultural griega. Ante la islamización del Irán, algunos mazdeístas se refugiaron en la isla de Ormuz (golfo Pérsico) y en la India (los parsis), donde perviven comunidades de esta religión (además de las que han sobrevivido en el propio Irán). 

El zoroastrismo ejerció una influencia notable sobre el judaísmo y está muy presente en la doctrina cristiana. Su idea de un mundo dominado por la lucha entre los principios del bien y el mal fue también la base del maniqueísmo desde el siglo III. 



-EL BANCO DEL VATICANO ES EL PRINCIPAL ACCIONISTA DE LA MAYOR INDUSTRIA DE ARMAMENTOS EN EL MUNDO.



    Tal vez pocas personas saben que la fábrica de armas Pietro Beretta Ltda. (la mayor industria de armamentos en el mundo) y que es controlada por el Holding SpA Beretta y el accionista mayoritario de la Beretta Holding SpA después de Gussalli Ugo Beretta, es el IOR (Instituto para las Obras de Religión [comúnmente conocido como Banco del Vaticano]) institución privada, fundada en 1942 por El Papa Pío XII y con sede en la Ciudad del Vaticano.



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Detrás de todo esto es la siguiente:

Roma no se hizo en un día, el Vaticano tampoco, y menos su actual opulencia. Tiene sus raíces en el siglo IV de la era cristiana, que es cuando el emperador Constantino se convirtió al cristianismo y puso a disposición del Papa Silvestre I una colosal fortuna, de hecho lo transformo en el 1er Papa rico de la historia.

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        La iglesia católica es la única organización religiosa del mundo que tiene como cuartel general un estado independiente: La ciudad del Vaticano. Con sus 2 Km² de superficie el Vaticano es mucho mas pequeño que muchos campos de golf del mundo; Y para recorrerlo sin prisa no se necesita mucho mas de una hora; Contar sus riquezas, sin embargo, llevaría bastante mas tiempo.

La moderna opulencia del Vaticano se basa en la generosidad de Benito Mussolini, quien gracias a la firma del tratado de Letran entre su gobierno y el del Vaticano, otorgo a la iglesia católica una serie de garantías y medidas de protección. La “Santa Sede” consiguió que la reconocieran como un estado soberano, se beneficio de la exención impositiva de sus bienes como en beneficio de sus ciudadanos, tampoco tenían que pagar derechos arancelarios por lo que importaran del extranjero. Se le concedió la inmunidad diplomática y sus diplomáticos empezaron a gozar de pos-privilegios de la profesión, al igual que los diplomáticos extranjeros acreditados ante la Santa Sede. Mussolini se comprometió a introducir la enseñanza de la fé católica en todas las escuelas del país y dejo la institución del matrimonio bajo el patronazgo de las leyes canónicas, que no admitían el divorcio. Los beneficios que recibió el vaticano fueron enormes entre ellos los beneficios fiscales, fueron preponderantes.




              En 1933, el Vaticano volvió a demostrar su habilidad al entablar lucrativos negocios con los gobiernos de corte fascista. Al concordato de 1929, firmado con Mussolini, le siguió otro entre la Santa Sede y el III Reich del Canciller Adolf  Hitler. El gestor Francesco Pacelli fue una de las figuras clave del pacto con Mussolini; Su hermano el cardenal Eugenio Pacelli, futuro Papa Pio XII fue el encargado de negociar como Secretario de Estado Vaticano, la firma del tratado con la Alemania de Hitler. Pío XII conocía bien Alemania. Fue nuncio en Berlín durante la Primera Guerra Mundial y, luego, como Secretario de Estado de Pío XI, tuvo numerosas intervenciones ante el rumbo que estaba tomando la política alemana. En calidad de tal, intervino decisivamente en la encíclica de Pío XI, conocida como «Mit brennender Sorge»(que puede traducirse «Con ardiente preocupación»). La iniciativa de la encíclica partió, contrariamente a lo que se cree, de los obispos alemanes, el primer borrador fue redactado en Roma por el Cardenal Faulhaber. El entonces Cardenal Pacelli, que dominaba el alemán, le dio forma definitiva, presentada a Pío XI, fue firmada y publicada.A pesar de la constante y gran presión mundial, el Papa Pio XII siempre se negó a excomulgar a Hitler y a Mussolini, su pontificado se caracterizo por adoptar una falsa pose de neutralidad. Cuando los Nazis invadieron Polonia, Pio XII se negó a condenar la invasión; Una de las mayores ventajas que obtendría el Vaticano del muy lucrativo acuerdo que mantenía con Hitler era la confirmación del Kirchensteuer, o sea un impuesto eclesiástico; Se trata de un impuesto estatal que aun hoy día deben pagar los creyentes alemanes, y que solo pueden eludir si renuncian a su religión. En la práctica, son muy pocos los que renuncian a ella. Este impuesto representa por si solo entre el 8 y el 10 % del total impositivo que recauda el gobierno Alemán.