-EL DÉJÁ VU

Revista AÑO/CERO

AÑO: XVIII Numero: 04-201

Por: Isabela Herranz

El termino déjá vu se ha puesto de moda últimamente y se ve con frecuencia en películas, libros y articulos de revistas, Sin embargo, a pesar de que aproximadamente un 70% de personas cree haberlo experimentado alguna vez, la mayoria tiene una idea confusa de este fenómeno y lo identifica erróneamente con otras variantes del mismo muy distintas entre si.

El termino frances déjá vu (literalmente «ya visto» ) fue acuñado por el investigador Emile Boirac (1851-1917) para describir la sensación que tienen algunas personas de haber visto o experimentado en el presente algo que creían haber conocido en el pasado. Cuando la gente habla de déjá vu en realidad están experimentando un déjá vécu. Sin embargo, el fenómeno es tan sutil y complejo que abarca al menos tres tipos de experiencias. En los años ochenta, el doctor suizo Arthur Funkhouser renombro el fenómeno al describir las diferencias existentes entre ellas.

· Déjá vécu (ya vivido). Se refiere a una sensación ocasional de que estamos diciendo o haciendo algo que ha sido dicho o hecho en fecha remota; que hemos estado rodeados de los mismos rostros, objetos o situación; por ultimo, que sabemos perfectamente lo que alguien va a decir a continuación como si lo recordáramos de repente. El déjá vecu esta pleno de detalles y se recuerda durante mucho tiempo debido a su intensidad. Suele experimentarlos un tercio de la población, entre los 15 y los 25 años. Además de la vista suelen estar implicados el oído, el gusto, el tacto y las percepciones propioceptivas.

· Déjá senti (ya sentido). Se confunde con el Déjá vécu, pero posee rasgos muy diferentes: es un suceso exclusivamente mental; no hay aspectos precognitivos que permitan a la persona sentir o saber de antemano lo que va a decirse o hacerse; se olvida enseguida.

El neurologo John Hughlings Jackson describió en 1889 la experiencia de un paciente suyo con epilepsia del lóbulo temporal y, por ello, mucha gente cree que es sintomática de dicha enfermedad, pero no es así. Según su explicación, la experiencia se produce cuando algo olvidado se recuerda con gran exactitud, como si fuera una secuencia que está aconteciendo en ese momento, pero simultáneamente se tiene certeza de que el recuerdo es falso. Este se activa por la voz de otra persona, por el pensamiento propio verbalizando mentalmente.

· Déjá visité (ya visitado). Esta experiencia también se confunde con el déjá vécu. El sujeto visita un lugar que no conoce y a pesar de ello le resulta familiar. Incluso se guía a través del mismo con suma facilidad. Para distinguirla del déjá vécu, hay que preguntarse lo que nos resulto familiar fue solo el sitio y el emplazamiento de los edificios y/o objetos, o si se estaba inmerso en alguna situación especifica. La experiencia tiene que ver con la geografía y con las tres dimensiones del espacio, mientras que el déjá vécu tiene mas que ver con sucesos y procesos temporales. La reencarnación, los viajes fuera del cuerpo (viaje astral) y los sueños podrían explicar algunos casos de déjá visité, así como el hecho de haber leído con anterioridad una descripción detallada del lugar y haberla olvidado por completo.

¿Lo sabias…?

En 2006 el neurólogo Chris Moulin recreó situaciones de déjá vu en laboratorio y comprobó que cuando una persona reconoce algo familiar pueden darse dos procesos, uno normal y otro anómalo:

1) el cerebro comprueba si había observado antes los contenidos de la escena y, en caso afirmativo, una zona distinta del cerebro los identifica.

2) si la situación es nueva pero resulta familiar puede deberse a algún trastorno neurológico. De hecho, las personas con déjá vu crónico tienen activo ese circuito casi siempre aunque en realidad, sus «recuerdos» no existen.